La otra cara de la moneda

Hemos venido hablando de un tema transcendental tanto a nivel personal, como, a nivel empresarial, que se conoce como gerenciamiento de riesgo, enfoque que ha venido siendo adoptado, por, los entes de supervisión, vigilancia y control, como mecanismo para preservar el cumplimiento de los objetivos institucionales declarados, en la oferta de valor para todos los grupos de interés, no obstante, hemos dejado un poco de lado el concepto de incertidumbre, pues esta juega a favor o en contra, dependiendo del resultado final, si esta se convierte en algo positivo, estaríamos hablando de oportunidades, no obstante, si se convierte en algo negativo, que impide o altera el cumplimiento de los objetivos institucionales estaríamos hablando de un estado de riesgo.

En muchas ocasiones hemos escuchado las siguientes expresiones…, si hubiéramos invertido en ese proyecto, no visualice el potencial de esa iniciativa, ese era el mejor partido, entre otras, es decir, hemos dejado pasar una oportunidad. Bien porque somos muy conservadores o porque simplemente no logramos leer entre líneas, las expectativas del consumidor y los signos que va mostrando el mercado sobre posibles tendencias, en el corto, mediano o largo plazo. Las oportunidades se pierden por falta de creer, de convencimiento, de fe, de investigación, por querer siempre ir a lo seguro, y en algunos casos por ser adversos a lo desconocido.

Ser el primero, permite no solo descremar el mercado, sino, que de paso se logra alcanzar la mayor rentabilidad, hasta tanto los posibles competidores reaccionen y el valor económico generado disminuya frente al periodo inicial. Las oportunidades, sin lugar a dudas, se convierten en la cuota inicial para alcanzar el éxito y optimizar resultados, tanto a nivel personal como a nivel empresarial, las oportunidades en la vida se aprovechan, pero, en algunas situaciones, también se pierden. Perder una oportunidad no solamente es dejar de obtener un beneficio, puede, inclusive, afectar la continuidad y viabilidad de un negocio.

Coloquialmente, en la cultura latina, se habla, de la famosa malicia indígena, aplicado al concepto de oportunidad, no es otra cosa, que estar en el lugar y momento exacto, para cristalizar una idea, para estructurar e implementar una iniciativa, para migrar a un nuevo modelo de operación, en fin…. Para realizar aquellas actividades, que van a permitir, marcar la diferencia, es más, siendo aún más ambiciosos, podríamos pensar que la oportunidad se pueda crear, la pregunta que surge es ¿Cómo lo hacemos? Una de las premisas es ser inquieto, estar siempre en la búsqueda de situaciones que me permitan ser el mejor, mantener la actitud correcta y ser conscientes que se puede fallar, tener claro el horizonte, hacia donde queremos llegar, arriesgarnos a dar el primer paso, y por último CREER, si en mayúscula, porque muchas oportunidades se pueden perder porque no pensamos en positivo, y desconfiamos de la capacidad para poder marcar diferencia, recuerda aquel dicho “si no lo hago yo, otros lo harán”.

A nivel empresarial, el derrotero para maximizar las oportunidades lo demarca el foco, que se ha declarado como compromiso con los grupos de interés a través de la oferta de valor. Tener claro el norte, se convierte en la cuota inicial para ir en la búsqueda de éxito, lo anterior, en sinergia con los departamentos de investigación y desarrollo, de las corporaciones, se constituyen en elemento crucial que coadyuva en el proceso para aprovechar y crear oportunidades. Los factores de capacidad que influyen en la materialización de una posible oportunidad, pueden derivarse del componente legal, normativo, tecnológico, social, comercial, estratégico y táctico.

Desde el punto de vista técnico, al igual, que, en el enfoque de riesgo, se debe implementar el siguiente ciclo:

a. Contexto. Es importante conocer todo lo que rodea al objeto de análisis.
b. Identificación de oportunidades. Corresponde a preguntarnos el qué, el cómo, el cuándo, el dónde, puede estarse configurando una posible situación, que constituya una oportunidad.
c. Análisis. Es la etapa del ciclo, que permite conocer los factores generadores de la oportunidad y las posibles consecuencias.
d. Evaluación. Es el resultado de evaluar la oportunidad, en términos de sus dos dimensiones, potencialidad y capacidad, para poder determinar la pertinencia de la oportunidad, esta debe estar en línea con los objetivos estratégicos de la corporación o del individuo, dependiendo del objeto de análisis.
e. Priorización. Es preciso priorizar las oportunidades en función de su posible impacto en el negocio, en términos de, generación de valor socioeconómico, y de acuerdo con los recursos disponibles, que se requieren para materializar la oportunidad.
f. Estructuración e implementación. Es importante delinear detalladamente la fase preoperativa que corresponden con la estructuración y la fase operativa correspondiente a la implementación.
g. Seguimiento y Monitoreo. Se realiza a los tres estados, antes, durante y después, el seguimiento permite, medir el beneficio de la oportunidad, el cual puede traducirse en incremento de participación de mercado, nivel de facturación, reducción de costes, y en general, una mayor contribución del negocio a los resultados de la corporación. A su vez, el seguimiento continuo, permite ajustar las actividades en el evento que se requiera, a fin de cumplir, con el propósito final.
h. Impacto. Corresponde a medir el beneficio agregado, que proporciona la implementación de la oportunidad, este se puede estimar desde el inicio de la fase de estructuración, hasta el final del proceso de implementación.

Debemos tener presente, que el gerenciamiento de las oportunidades, es vital para consolidar la permanencia y viabilidad, en función del cumplimiento de sus objetivos, teniendo en cuenta la dinámica y flexibilidad para adaptarse a los cambios, y poder aprovechar las ventajas comparativas de ser el primero… “1+1=3 el poder del gerenciamiento de las oportunidades”, Daniel Rivera.

Te invitamos a leer este artículo y toda la revista del mes en su versión ISSUU, dando click en la imagen

También podrás leer el artículo anterior aquí: El cumplimiento de la estrategia pa cuándo?