Boda Mexicana ¡Perfecta!

Tita Barrera-. El mes pasado tuve la gran fortuna de asistir a la boda mexicana de unos amigos en Oaxaca de Juárez. (ella de CDMX y el de Viena, Austria) aunque ya habían puesto el SI ante el civil, con una boda sumamente divertida y muy tradicional en Austria, decidieron hacer lo mismo en México.

---

---

Karlita Villarroel y Maximilian Speiser estuvieron analizando el lugar donde harían lo más memorable de sus vidas, y la razón a decidirse por la bella Oaxaca, fue por ser el epicentro de la gastronomía mexicana, claro, a esto le podemos aunar la gran variedad de ecosistemas y biodiversidad, puesto que cuenta con maravillosas playas, montañas, bosques, selva, etc., etc.

¡Oaxaca es un lugar único y mágico, ya que tiene una hermosa cultura, artesanías coloridas y su gente cálida!

No es algo extraño saber que nuestra cultura es fiestera, colorida, bailadora, musical… En fin, ¡encantadora!

En Oaxaca los restaurantes hacen la diferencia porque tienen muchísimas terrazas acondicionadas para ser el punto de reunión indicado. Ya que cuenta con lo mejor de ¡comidas, bebidas, atardeceres y vistas increíbles!

Algunos lugares para comer y/o tomar un mezcalito de ensueño son: Casa Sierra Azul, Casa Oaxaca, Restaurante Pitiona, Origen, Sabina Sabe, Vaca Marina, Levadura de Olla, Crudo… ¡Y la lista sigue!

Nosotros en la boda que comenzó con la peculiar y muy diferente invitación, que era un pasaporte, el cual contaba con todos los eventos, códigos de vestir, y sitios en donde comprar, etc., etc., etc., ¡desde allí me encantó la idea de ir a la boda en Oaxaca!!!

Primer día, Calenda de rompe hielo… ¿Qué más se puede pedir? Los danzantes con esos majestuosos disfraces y la gente animando a cantar y bailar en medio de la calle es ¡ESPECTACULAR! ¡Nos daban unos shots con collar de bamboo para poner mezcales y entrar a modo boda! Luego la cena y tragos coquetos en una terraza, donde entre mezcales y DJs nos dieron las altas horas de la noche.

Al día siguiente fue de excursión a la Zona Arqueológica de Monte Albán; ciudad de las más importantes de Mesoamérica, capital de los Zapotecas.

A la mañana siguiente estábamos en las prisas de la boda, entre el peinado, el vestido y el maquillaje, el show de siempre… Al llegar al templo de Santo Domingo de Guzmán, que está majestuosamente imponente desde afuera junto con su arquitectura barroca novohispana, gran lugar para sellar ese bello matrimonio; después obvio, como casi todos los sábados en Oaxaca de Juárez, ¡la Calenda de nuevo!!

Llegamos al lugar de la fiesta y fue en el impresionante Jardín Etnobotánico de Oaxaca, un lugar verdaderamente de ensueño, y arreglado divino para esta boda… entre comidas espectaculares, bebidas, fotos, bailes y DJ ¡la pasamos genial!

Nada como ver a una pareja tan enamorada y a tus amigas muy divertidas; ¡esta vez sí nos dieron las altas horas casi de la madrugada! Pero con mucho ánimo…

El cierre de los eventos fue enmarcado en un brunch muy coqueto en otra de sus Terrazas con comidas típicas y la despedida de todos los asistentes de terraza en terraza… como si nunca nos quisiéramos ir de esta bella ciudad.

Quedo en regresar para conocer más de mi lindo Oaxaca, su tour de Mezcal que te lleva a los palenques, sus atardeceres en alguna playa; el taller de Jacobo y María, donde hacen alebrijes, que también es escuela y ayudan a mantener la tradición; los famosos talleres de barro negro. Las visitas a los mercados donde hay de TODO, en fin, tanto que conocer, y todo esto y más… dentro de nuestro bello ¡México!

Agradezco a Max y a Karlita por la invitación a su celebración, y a mis amigas Jennifer Lavalle, Claudia Ortega (la negrita), Claudia González, Yolanda Esposito, Jimena Llaneza, Lydia Portilla y Vanessa Adame, por ayudarme, aguantarme y poner su información para este artículo… ¡Gracias TOTALES!

¡See u soon Oaxaca de mis amores!

Si te gustó el artículo de Tita Barrera te gustará: ¡Nuestro genio Cancunense!