Incongruencia electoral.
Por Pepe Juan Chilón.
Las alianzas entre partidos no son nuevas, en cada proceso nos han demostrado que sus ideologías estatutarias son secundarias. Si el objetivo es llegar al poder, no importa lo que se tenga que hacer. Mire usted que un partido, por ejemplo, está por estatutos a favor del aborto y su aliado va en contra. ¿Cuál será su propuesta electoral final?
Es por ello necesario que todos analicemos en este proceso a sus candidatos pues sus partidos por congruencia van perdiendo. Es decir: al final, el candidato tendría en teoría el compromiso de cumplir la plataforma electoral de su partido. Grave problema el que tiene dicho candidato, si sus partidos van encontrados en torno a su ideología.
En este proceso es necesario centrar nuestra atención en el ser humano que va como candidato, en su vida y sus ideas, pues en los hechos él será quien aterrice una u otra ideología política.
Será entonces una oportunidad para reconocer que por más partidos que existan, las oportunidades de participación política serán siempre acorde a los intereses de los propietarios de la patente. Qué bien le haría a la democracia ver a los partidos ir solos en las contiendas y estos a su vez sumar a ciudadanos libres que encabecen sus candidaturas. Me parece que los partidos podrían recuperar la confianza perdida por sus conflictos internos.
En fin, es nuestro deber ciudadano el votar y elegir a los mejores, por lo menos a quien cubra el perfil que corresponda al cargo.
Es lo mínimo que esperamos.
