Con este acuerdo se implementarán proyectos para reducción y captura de casi un millón de toneladas de carbono en un lapso de 10 años, como de conservación forestal.Estos generarán recursos adicionales a los ejidos para fomentar el crecimiento económico y mejorar las condiciones de vida de sus habitantes.
Este tipo de proyectos cuentan con elementos novedosos no solo porque el tema es reciente, sino porque establecen como eje central la conservación y el desarrollo de las comunidades donde se implementan.
Además de los recursos económicos derivados de la venta de certificados de captura de carbono, se destacan otros beneficios.
Entre estos se encuentran servicios ambientales como la captación de agua y oxígeno, la preservación de la cobertura vegetal.
Este beneficio mantiene a diversas especies de aves y animales silvestres, así como la protección de especies en peligro de extinción como el jaguar o el venado de cola blanca.
Asimismo, proporciona a todas las personas de la comunidad formas de producción amigables con el ambiente que les permite preservar sus tradiciones.
De igual forma, les ofrece alternativas e ingresos adicionales en el corto, mediano y largo plazo.
Adicionalmente, se contribuye al fortalecimiento del mercado de carbono en México y alcanzar las metas de reducción de gases de efecto invernadero.
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